jueves, 26 de junio de 2014

La actitud de la Roja.

Si acabamos mal el mundial de fútbol, no hemos empezado mejor la siguiente fase del europeo. El desaire de la selección a los pocos aficionados que tuvieron el valor de apoyarlos incluso en los peores momentos no es precisamente ejemplo de la todavía vigente campeona del mundo. Está claro que a todos nos gusta ganar, pero también hay que saber perder y si esto se hace con elegancia pues mejor que mejor. Alguien tuvo que tomar la decisión de evitar a la pequeña muchedumbre pero en mi opinión fue equivocada. Así cuando ganamos la multitud nos congratula, también nos debería congratular ver a un sacrificado grupo de aficionados alentando una rápida recuperación. La puerta de salida y abandono tanto del aeropuerto como del mundial no fue la apropiada. Somos y hemos sido muy grandes en este deporte como para no demostrar esa grandeza. Nos queda mucho que ver de estos campeones, a pesar del lógico reciclaje, sobre todo por la gran cantera de la que disponemos, como para no seguir demostrando esa grandeza con actitudes más propias de campeones que de fracasados. Esperemos una pronta recuperación de esta selección por el agotamiento de la larga temporada y el deseo de estar con la familia, pero la recuperación más esperada quizás sea la de una actitud de cara a próximos acontecimientos y nuevos objetivos. Por lo tanto, mi total desaprobación a estos desaires, sea del deporte que sea, hacia una afición que incondicionalmente muestra su apoyo y deseo de seguir viendo durante mucho tiempo una campeona. SALUDOS.

viernes, 20 de junio de 2014

Nos vamos a casita.

Nadie se hubiese imaginado el final de la Selección Española de Fútbol en este mundial, Brasil 2014. Debo confesar mi total desconsuelo, tristeza y malaleche tras el resultado del segundo partido contra Chile. También era muy difícil repetir por segunda vez consecutiva un segundo mundial, aunque se tratase de la generación de futbolistas mas grande de la historia de nuestro fútbol. ¿A cuantas cosas se les ha atribuido, por los expertos, tal desastre en la participación de este mundial?. Temporadas muy largas, fatiga física y mental, falta de confianza y/o motivación (falta de ambición), tener la mente en sus futuros más que en el presente, etc... Sea como sea nos han bajado los humos y ¡de que manera!. Acostumbrados a tantos éxitos y prácticamente sin pausas durante casi una década, de repente perdemos dos partidos seguidos y con vapuleo. ¡Bueno!, nos queda todavía uno, aunque intranscendente tienen dos opciones: empezar a disfrutar ahora que está todo perdido o seguir sufriendo con un juego sin orden ni concierto. El resultado final sea cual sea, va a ser volver a casa con las orejas gachas. Pero... que a nadie se le olvide que esta generación se merece el mayor de los halagos y homenajes por todo lo que nos han hecho disfrutar y creer en estas generaciones de talento y profesionalidad. En honor a mi padre, fans donde los hubiese de la selección, nos dejó sin ver como su selección triunfaba durante los casi ochenta años que vivió. Sin embargo, para mis hijos han nacido y vivido con la idea de que lo mas normal del mundo es; Conseguir la Selección Española de Fútbol títulos y títulos. Ganar con una pasmosa facilidad a lo que nos mal acostumbraron y ¡bendita mala costumbre!. Seguimos teniendo unas generaciones (Sub 21) que seguro nos darán muchas alegrías y esperemos sigan el ejemplo de estas otras que han hecho tanto. Tampoco sé si se dará el cambio generacional o más bien la mezcla generacional, pero tenemos el mejor grupo de profesionales en este deporte de toda la historia del fútbol, ¡nos ha costado!. ¡Por cierto!, no me cabe la menor duda que si en el cuerpo técnico hubiera existido un profesional de la psicología del deporte con experiencia, hubiese sido un apoyo muy importante en la toma de decisiones del técnico. Por lo tanto, no puedo mas que agradecer y con mucho entusiasmo estos últimos años en el deporte rey, a cual me considero muy aficionado, a una generación de chavales que creyeron en su único y buen hacer juego de control, toque y fantasía grupal. Por todo ello, gracias chavales, os habéis ganado un hueco en la historia de éxitos deportivos de este país. SALUDOS.

miércoles, 11 de junio de 2014

Un fuera de serie.

Aunque ya haya sido el centro de mi atención, no puedo por menos seguir mi admiración para un fuera de serie y gladiador galáctico propio de tiempos futuristas, y me estoy refiriendo a RAFA NADAL. Como supongo ya sabéis, conquistado su noveno Roland Garros, algo que me parece de otro mundo, no deja de tener en mente el seguir batiendo récord, igualando a Sampras y tras Federer. Mi reflexión va más encaminada hacia la década de triunfos del deporte español en el que incluimos no solo tenis, fútbol, balonmano, fútbol sala, hockey, artes marciales, etc... seguro me dejaré algo por ahí. Una década de triunfos en la élite del deporte y que me hacen estar muy orgulloso de paisanos que están a un nivel de profesionalismo internacional, en su campo, sin precedentes. Glorioso triunfo del deporte en contraposición a una política y políticos sin ninguna clase de gloria. Política y políticos encumbrados por sus ciudadanos en todo tipo de improperios y desconfianzas ganadas a pulso por su hacer. Curiosamente nos quieren poner de ejemplo a nivel internacional de como salir de una crisis y en la que ha tenido mucho que ver la colaboración de sindicatos mayoritarios. ¡Pues lo mismo la fórmula pasa por!, robar, malversar, mentir, extorsionar, asesinar por no recibir influencias, enchufar, vivir del cuento, cobrar (y mucho) sin preparación y otras muchas cosas.
Siguiendo con nuestro ejemplo de paisano fuera de serie, su tenacidad, preparación, trabajo duro, preparación mental, respeto, confianza y motivación no está en consonancia con una política echa para los mismos de siempre y que pagamos, también, los mismos de siempre. Tan popular es, en "la marca españa", los triunfos de Rafa Nadal, como los ERE´s, sobres, imitaciones de lujo para congresos o desvío de dinero procedente de Europa (Ave a Barcelona). ¿Que cuestiones pesaran más en los foráneos a la hora de pensar en este país?. Si alguno me sigue, que nos lo cuente. En nuestro país necesitamos una política, también galáctica y de otros tiempos mas modernos, no basada en la mentira, engaño, oportunismos, influencias. Una política capaz de crear confianza, con trabajo duro, entusiasmo y mucho liderazgo. Una política para un pueblo que lo necesita y lo espera. Los dinosaurios sucumbieron por algún tipo de cataclismo, lástima que no sea una ley universal como para que sucumban tantos dinosaurios de la historia. SALUDOS.

viernes, 6 de junio de 2014

Apatía, ¡fuera!.

Amigos, habréis notado mi poca participación en los últimos meses. Las circunstancias cambian, te lías un poco más, la desidia se apodera de tí, etc... Nada de esto son escusas como para no tener un mínimo de participación y no dejar morir un proyecto, sea el que sea. Y por eso... hablaremos un poquito de la apatía, y si es posible como salir de ella. Como cada "maestrillo" tiene su librillo, estoy seguro que todos habréis pasado por momentos como estos y habéis salido con éxito. La cuestión es cuando nos vuelve a pasar tenemos que recuperar memoria y darnos cuenta que hicimos en esos momentos de tanta apatía. Para mí funciona mucho lo que yo entiendo por la "sedimentación", es decir, aplacar todos esos pensamientos que por propia gravedad se van acumulando en nuestra mente y de alguna forma van madurando con el paso del tiempo. Esos pensamientos que te llevan hacia un letargo temporal y mentalmente acaparan tu atención sin dejarte hacer mucho mas. Esta "sedimentación" nos permite, prestarle atención a cosas que consideramos importantes y requieren su reflexión y atención pero de una forma poco activa. Están ahí, y sabes que están, no son prioridades y por ello lo dejas con ese letargo. ¡Ya llegará su momento!. Después viene la fase de "turbulencias", es decir, remueves el fondo y se crea mucho fango. Cuanta más "sedimentación" mas fango. Aunque este fango te permite prestarle atención a aquellas cogniciones, como partículas, que se mantienen en mas suspensión y tardan mas en volver a sedimentarse. Posteriormente hay un "proceso selectivo" cuyo objeto es la acción y solución, con sus objetivos y metas a conseguir. Para muchos quizás sea un proceso lento y tedioso, pero a mí me permite darle perspectiva a todo lo que hay acumulado y fijo prioridades. Esto no deja de ser un proceso cíclico con sus idas y venidas, subidas y bajadas y bucles necesarios. En las cosas que requieren urgencia y límites cortos de tiempo, no existe tal "sedimentación" puesto que no existe acumulación y por lo tanto por su premura requiere de otros procesos mas activos de urgencia. En otros tiempos todo esto se conocía como la "parálisis del análisis", aunque en realidad no existía tal parálisis puesto que existía un tipo de acción a un nivel distinto y menos visible. En estas últimas semanas han habido muchas cuestiones que comentar; fenómeno "podemos", abdicaciones, otras formas de estado, comedores para el verano, etc... La cuestión es, que mi poca actividad han dejado pasar todos estos comentarios y por ello tengo mi pesar. Mi propio proceso de "sedimentación" y "turbulencias", en estas últimas semanas está siendo el protagonista en mi tiempo libre, esperando el "proceso selectivo" que me ponga de nuevo en una participación mas activa. SALUDOS.